Delito
Se considera delito, ser
descubierto superando la barrera de la inmoralidad media aceptada por la
sociedad.
La idea de la inmoralidad
social media como barrera, medida, para calibrar el delito, tiene en España la
enorme virtud (ventaja) de que casi todo queda amparado por las sombras, como
tapado por la manta materna, sólo los atrevidos y los locos, se la juegan al
saltarse la barrera del cinismo social superlativo, por eso la aceptación
implícita del fraude fiscal y su sistema es tan rudimentario en la Piel de
Toro.
Y lo que acaece en nuestro coso
hispano, sucede a la vista de todos, los que saltan vacilantes son perseguidos
por los alguaciles, otros más atrevidos pero sin el oficio aún y las dotes
necesarias son embestidos por el rigor de media tonelada, los hay que llegan más
allá, pero muy pocos tienen el oficio, el arte, y la suerte del vencedor de la
faena, y salir por la puerta grande, aún quedarán los embates del destino,
esquivo y cambiante, más oscuro y pesado que la media tonelada de nobleza
salvaje anterior.
Si la moral social pare las
costumbres, y éstas fijan las leyes y sabiendo que la altura de la barrera, de lo socialmente admitido, del marco de lo moralmente legal es nuestra
y con ellas marcamos las lindes de la urbanidad…¿Qué altura de miras debemos
aceptar como suficiente para mirarnos unos a otros sin recelo ni sospecha?
¿Ser un poco más exigentes con
nosotros mismos, más veraces, en España? ¿En la tierra de la Picaresca?
Y si así fuera finalmente y
subimos la barrera ¿a quién ponemos en Comandancia, a un político, a un pillo, por algún lado la hemos de fastidiar?
Joio país este, nunca
tuvo buen Gobierno…